Déjame

Deja que te cuente mi historia
deja que poco a poco se nos olvide la melancolía
que vayamos viajando por el corazón a través de melodías

Deja que esta noche te diga
que me trae al fresco el resto de mi vida
que necesito susurrarte al oido caricias
que pinten de luz tu genial sonrisa

Deja que entremezclemos risas
que olvidemos el mundo normal de tonterías
que traspasemos la ropa, la piel
que me permitas acariciar tus labios de miel

Por qué no desperdiciar al sol las prisas
por qué elegir antes la tristeza que tu sonrisa
no dejaré que perdamos todos aquellos momentos
que hemos elegido compartir en terco secreto

Deja que esta noche te diga
que me trae al fresco el resto de mi vida
que necesito susurrarte al oido caricias
que pinten de luz tu genial sonrisa

Pintemos el suelo de mi habitación con tu ropa
que la gente cuente de nosotros todas las historias
historias geniales de aquellos que, sin miedo,
son capaces de retorcer el tiempo.

Permíteme que no deje que exista el adios
en nuestro lenguaje de las manos y los labios
permite que te enseñe cual es el sentido de tu piel
porque es a tí a quien mi cama exige

Deja que esta noche te diga
que me trae al fresco el resto de mi vida
que necesito susurrarte al oido caricias
que pinten de luz tu genial sonrisa

Cuando no sale nada

Hoy quería hacer la cancion más bonita del mundo,
pero solo salen tristes torpes versos de mi boca,
por favor dame una razon para quedarme mudo
cada vez que te tenga en frente a solas

Deja de darme cada día una de cal y una de arena,
hazme algo que me haga pensar que te tengo
una servilleta de algun bar decorada con un te quiero
pero deja de una vez de hacerme caminar por esta cuerda

Ahora si

Ahora si puedo escribir,
necesito saber dónde te escondes,
cómo abrir las puertas de tus rincones
déjame recoger tus besos para vivir

Déjame acabar en tu cama
enseñarte como se amolda el alma
y cómo no necesitas nada mas
tu y yo, una cama, el sueño

Ahora si te quiero decir,
que no se si veo señales de humo
que no se si es ganas de verlo
pero te aseguro que hoy si que creo

Creo en ti, creo en mi, en los dos
juntos en cualquier sucio rincón
tu y yo y nadie mas alrededor
y que empiece un baile de notas al sol

Invitemos a observar

Tirémonos en cualquier sucio rincón,
deja que te pueda invitar a un café,
enséñame lo que esconde tu habitación
y ya que estás, prueba a contestar los mensajes

Déjame ver la felicidad en tu rostro,
invitemos a la gente a observar,
observar el mundo con otros ojos

Ojalá que de nuestra imagen se desprenda desorden
absoluta normalidad, casualidad, causalidad
que solo desprendamos una felicidad enorme
mejor, dejemos los tamaños, la felicidad misma

Espero que de tu espalda salgan nuevas canciones,
que me dejes alguna vez recorrer con mis dedos
los caminos que una y otra vez mi vista recorre,
que me conozco de memoria en este poco tiempo.

Invitemos a observar a todo el mundo,
y demos ganas de sentarnos en un parque,
consigamos que por un momento todo quede mudo
disfrutemos del uno y del otro para que nunca sea tarde.

Cambiemos el Mundo

Cambiemos el mundo tu y yo,
tu y yo dentro de nuestra habitación,
visitemos en nuestra mente todos esos lugares,
dejame que te enseñe donde están todos tus lunares.

Tu y yo, el mundo alrededor
pintemos todas las paredes para que todo sea mejor
necesito hacerlo, y ver como sale tu sonrisa,
esa sonrisa con la que puedo escribir cientos de melodías

Dejame meter las manos en tus bragas,
convencerte que fuera de aquí no hay nada
que no podamos cambiar, que no podamos pintar,
que a partir de aquí solo tenemos que imaginar.

Me has enseñado desde tu cama a cambiar el mundo
a que yo mismo era capaz de romper aquel muro,
necesito probar en tu boca el sabor de la noche,
pintar en tu piel y en tu espalda una serie de acordes

Vayamos donde el sol nunca nace, donde nunca se pone,
ahora solo tengo fuerzas, solo tengo canciones,
que hablan de ti, del mundo del ser y no ser,
de como entre tus caricias aún me puedo volver a conocer

Cambiemos el mundo a mordiscos,
hagamoslo ahora que encuento motivos,
ganas de vivir, perdiendo miedos y sin ganas de huir
la verdad de todo es que me muero de ganas por verte sonreir.

Compañeros de camino

La calle ahora callada permite oír los lamentos de aquellos a los que la vida no trata como ellos desearían, la noche abraza los suspiros, introduciéndolos cada vez más y más en los maltrechos corazones de aquellos que lloran por lo perdido, por lo amado y nunca obtenido, por lo amado y ni siquiera soñado.

Yo a veces intento, muy callado escuchar lo que dicen los lamentos, presto atención para aprender, para aprender de aquellos que todo lo perdieron, de aquellos que nunca ganaron. De los que nunca aprenderé es de los queno llegaron a soñar, de aquellos que dieron todo por perdido antes de empezar.

Mientras yo, sentado en el suelo de mi aparente celda dibujo sobre el cielo, otro mundo, otra realidad, marco en las paredes sueños cosidos con la realidad que le otorga mi corazón, y con la misma que le niega mi razón.
Así es mi día, hago y deshago. Compañeros, dirán que estoy loco, pero he aquí mi sueño, que aunque cosa y descosa, mi prenda sigue, no la verán pues siempre deshago menos de lo que hago pero en una cantidad ínfima para mantener a mi razón callada y a mi corazón contento.

Cierto es que ahora me invade la melancolía pero incluso en los más oscuros momentos, uno debe de observar la fortuna que le acompaña, uno quizás al final del día debe conformarse con lo que ha conseguido para que por la noche se renueven los sueños, para que por la mañana se siga con hambre, con hambre de crear ilusiones, con ganas de pintar nuestra aparente celda, de transformarla en una habitación de la que podamos salir,
en la que no encasillarnos y destrozar nuestra vida, nuestro sueño. Pintemos de paisajes, pintemos de sentimientos nuestra vida y dejemos lejos los viejos dictadores de la razón.

Aunque ya es de noche,y triste me dispongo a llorar... Hoy me debo a mis compañeros de camino, a mis compañeros de fatiga, a aquellos que todo lo perdieron, a aquellos que nunca ganaron.

El camino

Gente corriendo de un lado de la calle a otro, no se miran, no se hablan, ni si quiera dirigen sus tímidas miradas hacia ningún lado que no sea al constante y por otra parte obligado terco caminar.No tienen ningún gesto en la cara, nada que indique identidad alguna, todos son engranajes de una máquina muy vieja pero muy bien engrasada.
No se paran a pensar donde irán, aunque todos quieren llegar al mismo sitio, ninguno lo
consigue. Los más jóvenes tienen claro la razón de su caminar, pero cuanto más andan, más pierden el faro de sus pasos, la luz que alumbra el final del camino.
Divertido y a la vez, asustado, observo el camino que lleva la muchedumbre, un camino sin razón, un camino en el que se confunde el fin con el medio, en el que en vez de usarlo como medio para alcanzar sus metas, sus sueños, aquellas ideas que cambien nuestra realidad, lo convierten en un torpe objetivo de su caminar, en un andar por andar, en un andar sin observar, sin mezclarse con la tierra por la que andan, siempre preocupados, siempre abstraídos en lo que van a conseguir tras años y años de realizar aquel camino, camino que, si estuviera diseñado como se debe,
estaría alumbrado por el faro de los sueños que quizás una noche en la que olvidas temores y miedos, te lleva a los brazos de la meta que realmente todos buscamos.

Divertido y a la vez... triste, tan triste... pues cual es mi sorpresa que me hallo andando junto a los demás, buscando mi identidad perdida, buscando un sentido a mi torpe caminar, y hallando como única respuesta al mismo camino.